La Casa de la Florencia es la denominación con la que he bautizado mi alojamiento por ser el nombre de mi abuela y la manera en la que es conocida esta casa- Taller de carruajes, por las gentes del pueblo de Castilla- La Mancha, donde está ubicada.
A lo largo de más de 250 años, cinco generaciones de mi familia han dejado sus vivencias y su trabajo en este lugar, que finalmente llegó a mis manos tras arduos esfuerzos. En aquella época de incertidumbre, debido a las dificultades que estaba encontrando para adquirir la casa, recuerdo que le comente a una amiga, profesora de Historia y Bellas Artes, mi temor a no poder conseguirlo. Su respuesta cargada de romanticismo ha sido desde entonces un estímulo. En su opinión, una casa con tanta historia, en la que han vivido tantas personas de una misma familia, no deja que la habite cualquiera. No sólo tú tienes que estar enamorada de la casa- me dijo- también ella tiene que elegirte a ti. Finalmente, la casa pasó a mis manos y reconozco con orgullo que ha merecido la pena trabajar sin descanso, todos los veranos de los últimos 10 años, en su restauración. Limpiar las vigas de la impresionante estructura de madera que soporta el tejado así como, los suelos de barro e hidráulicos o las piedras de sus muros, todo ello, con la ilusión de devolverle su antiguo esplendor.
Finalizados los trabajos de restauración y después de vivir algún tiempo en Inglaterra, empezó a tomar forma en mi mente, la inquietud de convertir este entrañable lugar, en un nuevo concepto de hospitalidad, donde se mezclaran descanso, ocio y la cultura.
Mi andadura en el campo de la Comunicación, tras cursar estudios de periodismo y trabajar en este ámbito, primero como periodista económica y después como asesora de grandes grupos empresariales; junto con mi afición por la restauración y la decoración, me han mantenido en contacto con el mundo de la cultura, los idiomas y los viajes y han sido el perfecto caldo de cultivo para desarrollar esta idea.
Desde La casa de la Florencia quiero ofrecer un nuevo concepto de alojamiento abriendo las puertas de un entorno que respira autenticidad, comodidad y belleza. Quiero ejercer de improvisada anfitriona y mostrar, una forma diferente de vivir experiencias que forman parte de la verdadera idiosincrasia de una tierra cargada de magia, tradiciones y cultura.
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